La tormenta de hielo corta el suministro eléctrico a más de 50.000 habitantes de Nueva Escocia
La tormenta comenzó en la mañana del viernes 4 de febrero y duró más de un día.
Los equipos de Nova Scotia Power tuvieron que trabajar toda la noche para restablecer el suministro eléctrico debido al mal tiempo. La situación se complicó por el hecho de que muchas carreteras Nova Escocia estaban heladas.
Nova Scotia Power pide precaución y que se mantenga alejado de las líneas eléctricas dañadas. Los meteorólogos esperan rachas de viento de hasta 40 km/h, o 11 m/s. En la costa norte, los vientos podrían ser más fuertes: 60 km/h, o 17 m/s. Existe el riesgo de que los árboles cubiertos de hielo sigan cayendo y derribando cables.
Muchas instituciones, incluidas las instalaciones médicas, fueron cerradas temporalmente. El transporte público ya estaba en "plan de nieve", evitando las zonas inseguras, por lo que los autobuses se reanudaron el sábado por la mañana como estaba previsto.
La mayoría de los estudios sobre el cambio climático en Nueva Escocia predicen un aumento de la frecuencia e intensidad de las tormentas. El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático prevé que el nivel medio del mar en la costa oriental de Canadá aumente un metro en los próximos 80-100 años. Aquellos que consideren Nueva Escocia como su futuro hogar deben considerar cuidadosamente los riesgos.
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