Canadá y sus socios del G7 se han retirado de cualquier trato con el Banco Central de Rusia
Esperan que esto impida a Rusia utilizar sus reservas internacionales de divisas para financiar la guerra con Ucrania.
El Reino Unido, Alemania, Italia, Canadá, Francia, Japón y Estados Unidos han congelado los activos financieros de Rusia. Todavía no se dispone de información específica sobre los activos que poseen estos países: oro, moneda, valores, obligaciones. Es muy probable que algunos de estos activos simplemente se pierdan en manos de Rusia.
Lo más probable es que estas sanciones tengan por objeto impedir que el Banco Central de Rusia regule el tipo de cambio del rublo, pero las relaciones comerciales con los países con los que se realizan pagos en dólares y euros también se verían gravemente complicadas, al igual que cualquier pago electrónico. Todavía no se sabe qué pasará con las transferencias hacia y desde Rusia. Pero ya hay informes de que algunos bancos rusos han tenido dificultades con Google Pay.
Rusia también corre el riesgo de quedar fuera del sistema financiero SWIFT, pero, como escriben los economistas, utilizar este sistema puede compararse a usar uno de los muchos mensajeros: es conveniente para transferir datos entre bancos, pero si algunos bancos no pueden utilizarlo, cambiarán a otros métodos de transacción.
Ya hemos escrito sobre la reacción de los canadienses ante la situación y la ayuda que Canadá ofrece a los ucranianos. Además, Canadá ha prohibido la entrada de aviones civiles rusos en su espacio aéreo y ha enviado a Ucrania dos aviones de transporte táctico C-130J y un grupo de 40-50 militares. Se afirma que Canadá destina otros 25 millones de dólares canadienses a la ayuda militar a Ucrania, pero no está dispuesta a intervenir directamente en la guerra ni a garantizar un cielo despejado sobre Ucrania, como ha solicitado el presidente Zelensky.
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