El sector del automóvil cae ante el poder de los sindicatos, pero el Estado no
Una huelga termina, otra continúa.
Los sindicatos canadienses prosiguen su implacable lucha por los derechos de los trabajadores. Así, el mayor de ellos, llamado Unifor, ha obtenido otra aplastante victoria, y de nuevo en la industria automovilística. El lunes llegó a un acuerdo con Stellantis, una multinacional de fabricación de automóviles.
"El acuerdo establece todos los elementos de nuestro modelo de acuerdo, las protecciones que los trabajadores del automóvil necesitan durante la transición a los vehículos eléctricos y los productos de nueva generación que nuestros miembros fabricarán en los años venideros", ha declarado James Stewart, Presidente del Comité de Negociación Principal de Unifor Stellantis.
Sigue el modelo de acuerdo para los trabajadores de la industria automovilística que Unifor ha desarrollado y ya ha conseguido alcanzar con General Motors y Ford Motor Co.
Lo que Unifor ha conseguido para los trabajadores de Stellantis
Para Stellantis, el acuerdo supone aumentos salariales de casi el 20% para los trabajadores de producción y del 25% para los obreros cualificados, así como aumentos salariales anuales generales. El sindicato también negoció una prestación de salario mínimo vital, la mejora de los planes de pensiones y la incorporación de vacaciones pagadas.
Las negociaciones fracasaron inicialmente, lo que provocó una breve huelga el domingo. A continuación, las partes negociaron durante toda la noche y llegaron a un acuerdo. Ese mismo día, el sindicato tuvo éxito en las negociaciones con St. Lawrence Seaway Corp.
Otra huelga en Quebec.
Las cosas no van tan bien para los empleados públicos de la provincia de Quebec. Allí, tres federaciones sindicales que representan a más de 400.000 trabajadores del sector público volvieron a no aceptar la oferta del gobierno de Quebec. Como resultado, se anunció que estaba dispuesto a seguir adelante con los planes de huelga.
"Teníamos esperanzas", declaró Magali Picard, presidenta de la Federación de Trabajadores de Quebec. — En lugar de eso, el gobierno ha seguido con "el mismo tono de arrogancia e insultos hacia los 420.000 trabajadores que representamos".
Los sindicatos, que han recibido mandatos de huelga de sus afiliados, afirman que mantienen su plan de huelga de un día. Está prevista para el 6 de noviembre, pero podría ir seguida de otras medidas, incluida una huelga total, si no se obtienen resultados.
La Tesorería Provincial describe las condiciones propuestas (y rechazadas) del siguiente modo: un aumento salarial del 10,3% en cinco años y un pago único de 1.000 CA$ a cada empleado. en el primer año del contrato. La propuesta también incluye subidas adicionales, por ejemplo para las enfermeras que trabajan de noche, por la tarde y los fines de semana, y para los ayudantes de profesor en secundaria.
Las negociaciones comenzaron hace aproximadamente un año, momento en el que los sindicatos plantearon sus primeras reivindicaciones. Quieren un contrato de tres años con aumentos vinculados al índice de precios al consumo. El primer año se pide un 2% más (o 100 dólares canadienses semanales, la cantidad que sea mayor) y un aumento vinculado al índice de precios al consumo (más un 3% el segundo año y un 4% el tercero).
