Una cuarta parte de los usuarios de Canadá se ha quedado sin conexión a Internet
También hay interrupciones en el servicio de telefonía móvil. Algunas personas ni siquiera pueden marcar el 911.
Rogers, que da servicio a unos 10 millones de abonados a la telefonía móvil y a 2,25 millones de abonados a Internet al por menor, informó de importantes fallos técnicos en la mañana del 8 de julio. El tráfico global de Internet en Canadá el viernes por la mañana era del 75% de los niveles normales.
No sólo la gente común se vio afectada. Se han interrumpido las emisiones de radio, han dejado de funcionar las operaciones bancarias por Internet, los pagos de bienes y servicios en línea y en los terminales bancarios, y las transferencias interbancarias. Las aplicaciones para pedir comida y taxis no funcionan, y todos los negocios implicados sufren pérdidas.
El Banco de Montreal dijo que la interrupción ha afectado a las sucursales de todo el país. Algunos automovilistas no pueden pagar el puente de la Confederación entre la Isla del Príncipe Eduardo y Nuevo Brunswick porque ahora sólo se acepta el dinero en efectivo.
La policía de Toronto ha declarado que se puede llamar al 911 y que no hay ningún problema por su parte. Sólo los abonados de Rogers tienen problemas. Este es uno de los principales problemas de la empresa: se le perdonó un fallo similar en 2021, cuando varias organizaciones comerciales sufrieron pérdidas, pero en Canadá existe una ley que exige al operador de telefonía móvil que garantice que el 911 puede ser localizado en todo momento y en cualquier lugar.
La agencia de noticias Reuters afirma que la interrupción se produce en medio de un intento de adquisición de su rival Shaw Communications. El acuerdo se ha pospuesto hasta ahora a petición de los reguladores antimonopolio canadienses. Canadá tiene algunas de las tarifas de móviles e internet más caras del mundo y el Gobierno ya ha intentado obligar a las principales compañías, incluida Rogers, a reducir los precios, pero hasta ahora no ha habido ningún resultado tangible.
Ahora que un fallo técnico de un proveedor ha causado tantos problemas incluso a quienes no utilizan sus servicios, sino que simplemente quieren pagar los productos en una tienda, por ejemplo, aumentan las declaraciones de que el monopolio es peligroso y el Estado tiene el deber de combatirlo con métodos más duros. Hay otra opción: hacer que los servicios de telefonía móvil e internet sean controlados por el gobierno federal, como los ferrocarriles y otros negocios de la Corona.