Una mujer de Nueva Escocia tejió 100 gorros de bebé para celebrar su aniversario
Lleva 30 años tejiendo gorros y chalecos contra la neumonía para niños necesitados.
La semana pasada, Etta Jamieson, una abuela de Truro (Nueva Escocia), celebró su importante cumpleaños comiendo mucho pastel y completando su proyecto de un año de tejer 100 gorros para niños necesitados.
Jamieson cumplió 100 años el 8 de septiembre, pero hace dos años decidió retarse a sí misma a tejer 100 gorros en un año. Atribuyó su deseo al hecho de que sus manos estaban sanas y quería volver a encontrar algún uso para ellas.
Jamieson empezó a tejer gorros para bebés y chalecos para la neumonía hace 30 años, cuando la iglesia presbiteriana de St James, en Truro, pidió ayuda para enviar ropa de bebé a países en desarrollo. Desde entonces, muchos de sus artículos se han enviado a Nicaragua y Malawi. Sin embargo, este último lote se donará al Centro Médico IWK de Halifax y al Centro Médico Colchester East Hants de Truro. El resto se destinará al árbol de Navidad de la iglesia presbiteriana de St. James a finales de año para personas necesitadas.
La costurera comenta modestamente sus actividades:
"Cuando haces algo por alguien, te hace sentir bien. Y creo que mientras tengas salud, debes hacer estas cosas.
Al terminar un proyecto de gran envergadura, la abuela ha empezado inmediatamente uno nuevo: ahora quiere tejer 101 gorros para su próximo cumpleaños. Dice que las cosas ya van bien: en la semana que ha pasado desde su centenario, casi ha terminado tres obras.
Por último, Etta Jamieson ofrece un consejo inestimable: "No te detengas en las cosas tristes ni en los momentos difíciles. Sé feliz y sigue riendo. Descansa mucho".
Añade que si uno quiere afrontar la vejez con dignidad, el secreto es sencillo: ayudar a los demás.