Los canadienses están hartos de la monarquía
Los canadienses están cansados de la monarquía, pero el Gobernador General les pide que den una oportunidad a Carlos.
No todos nuestros lectores saben que Canadá sigue siendo una monarquía y está sometida a la Corona británica. El jefe de Estado no es el primer ministro Justin Trudeau, sino el rey Carlos. Ayer, la Gobernadora General de Canadá, Mary Simon, asistió a su coronación. Se convierte así en la primera funcionaria canadiense que asiste a la coronación de un monarca británico en 70 años.
Mary Simon es una persona extraordinaria en muchos sentidos. Es la representante del Rey en Canadá y sus poderes ejecutivos son casi ilimitados. Tiene los mismos derechos que el Rey y puede destituir al Primer Ministro Justin Trudeau. Esta mujer es inuk por línea materna, puede hablar su lengua nativa, cazar, pescar y conoce las prácticas tradicionales inuit. Sabe montar un iglú. Su familia llevaba un modo de vida tradicional, y ella era la segunda mayor de 8 hermanos. Ha hecho mucho por proteger los derechos de los inuit en Canadá, ha representado los intereses de los inuit en Quebec como directora de una organización local, e incluso visitó Chukotka como parte de una delegación en 1988. El director soviético Patrushev hizo una película sobre ella titulada "Grullas para María". Anteriormente fue diplomática, periodista y activista de derechos humanos, y asumió el cargo de Gobernadora General en 2021.
En vísperas de la coronación de Carlos, Mary Simon pidió a los canadienses que le dieran una oportunidad. Sus argumentos no carecen de lógica. Según las encuestas, más de la mitad de los canadienses creen que es hora de abandonar la monarquía. Sin embargo, Simon señala que un paso tan serio para el país tendrá consecuencias importantes, y los habitantes del país no comprenden bien cuál debe ser su estructura política. Los partidarios de abandonar la monarquía no ofrecen vías alternativas para el desarrollo del país ni un plan de acción para conseguir la independencia. El Primer Ministro Justin Trudeau subraya la pasividad de los canadienses respecto a la independencia: no les gusta especialmente la monarquía, pero no imaginan ni quieren imaginar la vida en el país sin ella.
"Si estamos hablando de si necesitamos un rey a la cabeza de nuestro país, entonces en Canadá necesitamos tener una conversación muy seria sobre cómo queremos ver nuestro futuro y cuál es nuestro plan de acción... Todavía no he escuchado esas conversaciones", dijo Simon en una entrevista con el programa The House de la CBC.
Continuó: "He oído a mucha gente decir que no apoyan al Rey. Pero al mismo tiempo, creo que tenemos que darle una oportunidad. Tenemos que darle la oportunidad de demostrarnos que es un buen líder".
Los canadienses apoyaron fervientemente a la difunta Reina Isabel y se sintieron orgullosos de ella como símbolo. Su hijo Carlos tuvo menos suerte: a la mayoría de los habitantes del país no les cayó bien desde el principio y sin ninguna razón en particular. Mary Simon y varios politólogos opinan que aún no se han acostumbrado al nuevo líder y no le han visto en acción, por lo que es demasiado pronto para sacar conclusiones sobre él.
