Canadá entre los grandes países
Cumbre del G7
La semana pasada concluyó en Hiroshima una reunión de líderes mundiales conocida como la Cumbre del G7. Canadá, Estados Unidos, Alemania, Italia, Francia, Japón y el Reino Unido se reunieron por 49ª vez.
Como siempre, los líderes mundiales del mañana debatieron los retos de nuestro tiempo y establecieron nuevos puntos de referencia. Como países más desarrollados e influyentes, los miembros del G7 determinan en cierta medida el desarrollo del mundo y de la civilización.
Los líderes del G7 debatieron sobre el refuerzo de la seguridad económica mundial, la adhesión a la Carta de las Naciones Unidas (ONU) y la colaboración con las economías emergentes y los países en desarrollo para hacer frente a los retos comunes.
Los retos mundiales actuales -guerras, cambio climático, escasez de alimentos y amenaza de guerra nuclear— requieren soluciones urgentes y una estrecha cooperación internacional.
Los países del G7 siguieron comprometidos con sus objetivos:
- Proporcionar apoyo a Ucrania.
- No proliferar las armas nucleares.
- Reforzar la colaboración con socios de todo el mundo para construir una economía energética limpia del futuro que reduzca la pobreza y promueva la prosperidad para todos.
- Aspirar a unas emisiones de dióxido de carbono mínimas para un futuro medioambientalmente sostenible.
- Ayude a mantener la paz y apoye a los oprimidos de todo el mundo.
En su discurso, Trudeau abordó los temas de Rusia, el programa nuclear iraní, la energía limpia de Corea del Norte y cuestiones alimentarias.
Canadá ocupó la presidencia del G7 por última vez en 2018. Italia acogerá a sus socios en 2024 y Canadá en 2025.