Canadá necesita más trabajadores cualificados

Canadá necesita más trabajadores cualificados. Los cambios demográficos y el creciente número de jubilados están impulsando la demanda y creando la necesidad de contratar y formar a miles y miles de canadienses en oficios cualificados que pueden ser carreras prometedoras y gratificantes.

En Ontario, por ejemplo, el sector de la construcción es el segundo que más crece en la provincia. De 2019 a 2022, creció un 9,2%. Esta industria representa una parte importante de los puestos de trabajo del país. En Ottawa, sin embargo, hay varias ocupaciones cuyos titulares tienen buenas perspectivas de empleo en los próximos uno o dos años. Entre ellas se incluyen:

• ebanistas;

• carpinteros;

• cocina;

• mecánicos industriales (fresadores);

• operadores de grúas torre;

• Instaladores de tuberías de gas de clase A;

• Instaladores de tuberías de gas de clase B;

• Mecánicos de refrigeración y aire acondicionado;

• técnicos de mantenimiento de maquinaria pesada;

• electricistas industriales;

• jardineros paisajistas.

Esta semana, el Ministro de Desarrollo de la Mano de Obra, Randy Boissonnault, anunció el lanzamiento de una nueva campaña de sensibilización destinada a destacar el valor de las carreras de oficios cualificados. Se celebrarán actos de marketing experiencial en todo Canadá. Se celebrarán en Ottawa, Montreal, Fredericton, St. John's, Toronto y Vancouver.

En estas exposiciones interactivas, la gente puede aprender sobre distintas profesiones, encontrar ocupaciones en demanda en su provincia o territorio y averiguar qué hay que hacer para convertirse en un profesional cualificado. El objetivo de los actos es crear una experiencia personal y envolvente para los asistentes. Este fin de semana se celebrará el primero en Ottawa, en Lansdowne Park.

Esta campaña apoya los esfuerzos del Gobierno de Canadá en el marco de la Estrategia Canadiense de Aprendizaje, que apoya una mano de obra cualificada, integradora, certificada y productiva. Como parte de esta estrategia, el gobierno invierte aproximadamente 1.000 millones de dólares canadienses cada año en subvenciones, préstamos, créditos fiscales, prestaciones del seguro de empleo durante el aprendizaje, proyectos y apoyo al programa Sello Rojo, que establece normas uniformes para evaluar las competencias de los trabajadores profesionales en todo Canadá.