Las universidades de Quebec temen perder la mayor parte de sus ingresos
Concordia prevé un fuerte descenso del flujo de estudiantes procedentes de otras provincias y del extranjero.
Funcionarios de la Universidad de Concordia en Montreal dijeron que esperan "consecuencias financieras devastadoras" si las autoridades de Quebec no entran en razón. La universidad se refiere a una nueva política provincial destinada a proteger la lengua francesa y al consiguiente aumento de las tasas de matrícula en las instituciones de lengua inglesa para los estudiantes de fuera de Quebec.
Reducir el flujo de solicitantes de otras provincias
Durante un discurso a la comunidad universitaria esta semana, el presidente de Concordia, Graham Carr, declaró que la duplicación de las matrículas (el coste de un año de estudios alcanzará los 17.000 dólares canadienses para los estudiantes de otras provincias) convertirá a la universidad en una de las más caras del país. Las implicaciones son claras: la universidad se verá expulsada del mercado nacional. Carr prevé una reducción del 90% del flujo de solicitantes de fuera de Quebec.
Esto supondrá un enorme golpe para el presupuesto de la universidad. La administración de Concordia prevé un déficit de 8 millones de dólares canadienses en el primer año del programa, el curso 2024-2025. Sin embargo, cada año la situación empeorará porque los estudiantes que pagan las antiguas tarifas se graduarán y los nuevos estudiantes se negarán a matricularse debido a los nuevos precios. Al cabo de cuatro años, la pérdida anual de ingresos podría alcanzar los 32 millones de dólares canadienses, según Carr.
Reducción del flujo de solicitantes extranjeros
La situación no es mejor para los estudiantes de otros países. El plan de Quebec de cobrar a las universidades 20.000 dólares canadienses por cada estudiante internacional podría asestar un nuevo golpe a las finanzas universitarias. Concordia ha calculado que las pérdidas previstas ascienden a 30 millones de dólares canadienses en cuatro años.
En conjunto, las medidas del gobierno de Quebec supondrán una pérdida anual total de unos 62 millones de dólares canadienses. Para Concordia, esto representa entre el 9% y el 10% del presupuesto actual.
Reacciones de otras universidades y funcionarios
Las otras universidades anglófonas de Quebec, McGill y Bishop's, prevén consecuencias similares. Sébastien Lebel-Grenier, rector de la Bishop's University, prevé que el número de estudiantes se reduzca en un tercio y los ingresos en casi una cuarta parte de los niveles actuales. Y la Universidad McGill ya ha entrado en modo austeridad y congelado su programa de desarrollo de la lengua francesa.
Estudiantes de las tres universidades de habla inglesa salieron el lunes a protestar en solidaridad con los futuros solicitantes. Sin embargo, aún no se ha recibido una respuesta clara de las autoridades. El departamento provincial de educación superior ha declinado hasta ahora hacer comentarios.
El Primer Ministro de Quebec, Francois Legault, apoyó la iniciativa del Ministerio, afirmando que el porcentaje de centros educativos anglófonos en la provincia es de 25, lo que es "un poco demasiado". Legault espera que la medida ayude a frenar el crecimiento de la población anglófona de Quebec. El Primer Ministro espera comprensión por parte de las universidades y un diálogo constructivo.