Canadá comenta la retirada de Rusia del Tratado sobre Fuerzas Armadas Convencionales en Europa
Las autoridades rusas tomaron la decisión en mayo.
En la noche del 7 de noviembre, Rusia completó oficialmente el proceso de retirada del Tratado FACE, el Tratado sobre Fuerzas Armadas Convencionales en Europa. Su esencia son las restricciones a cinco categorías principales de armas y equipos: carros de combate, vehículos blindados de combate, artillería, helicópteros de ataque y aviones de combate.
Rusia lo suspendió en 2007, en 2015 dejó de participar en las reuniones y en mayo decidió denunciarlo.
La ministra canadiense de Asuntos Exteriores, Melanie Joly, condenó las acciones de Rusia:
"Esta retirada marca la culminación del desprecio de Rusia por sus obligaciones en virtud del Tratado FACE, empezando por su suspensión, sin fundamento jurídico, de la aplicación del Tratado FACE en 2007 y continuando hoy con su agresión ilegal e injustificable contra Ucrania, que es otro Estado parte del Tratado FACE. La retirada total de Rusia del Tratado FACE es un ejemplo más de sus esfuerzos por socavar la seguridad euroatlántica y el orden internacional basado en normas".
Según Joly, Canadá sigue comprometida con el control internacional de armamento. Sin embargo, ante la retirada de Rusia y la escalada de la situación geopolítica, Canadá decidió suspender temporalmente el Tratado a partir del 7 de febrero de 2024.
Además de Rusia, inicialmente firmaron el Tratado FACE Alemania, Estados Unidos, Canadá, Dinamarca, España, Francia, Grecia, Islandia, Italia, Luxemburgo, Noruega, Países Bajos, Portugal, Reino Unido y Turquía.
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