Canadá quiere abrir miles de nuevas guarderías de aquí a 2026
El gobierno federal promete ofrecer a los padres guarderías asequibles por tan sólo 10 dólares canadienses al día.
Para 2026, Canadá ha previsto crear 146.000 nuevas plazas de guardería y decenas de miles de nuevos puestos de trabajo para los cuidadores. Según la legislación canadiense, cuanto más jóvenes sean los niños, más adultos tiene que haber. En Ontario, por ejemplo, hay un cuidador de niños por cada ocho menores de seis años.
La Federación Canadiense de Guarderías estima que será necesario contratar un mínimo de 38.000 nuevos trabajadores de guarderías en todo el país. Dicho esto, Ontario, la provincia más poblada del país, aún no ha firmado un acuerdo con el gobierno federal sobre el compromiso de ampliar el sistema de educación preescolar, por lo que los futuros profesores de guardería de Ontario no están incluidos en esa cifra.
Pero los canadienses no quieren trabajar en las guarderías existentes. Ya en 2013, Child Care Canada, una organización de investigación independiente, descubrió que una cuarta parte de los trabajadores de jardines de infancia planean cambiar de carrera en tres años, y el 63% de los empleadores no pueden encontrar nuevos profesores para cubrir las vacantes.
Vea el vídeo sobre una mujer inmigrante que trabaja en una guardería municipal de Canadá hace seis años. Vaya a Youtube para ver la primera parte del vídeo.
Durante la pandemia, muchos cuidadores de niños abandonaron la profesión o empezaron a cuidar de los hijos de otras personas de forma privada. Esto se debe a que primero se cerraron todos los jardines de infancia y luego se abrieron con exigencias muy altas de limpieza y seguridad:
- alimentar a cada niño por separado;
- cualquier cosa que los niños se hayan llevado a la boca debe ser retirada rápidamente y desinfectada para que otro niño no entre en contacto con la saliva;
- desinfectar a fondo todos los objetos y superficies varias veces al día;
- no sólo llevar una máscara, sino también un protector facial.
Además, nadie se apresuró a vacunar ni a realizar pruebas periódicas a los cuidadores para detectar el COVID-19. Todos los educadores estaban en riesgo, ya que en principio los niños pequeños de Canadá no estaban vacunados en ese momento. Mientras que los profesores fueron vacunados de forma organizada, los maestros de jardín de infancia recibieron la vacuna de forma rutinaria. Además, la mayoría de los trabajadores de la guardería no cobraron la baja forzosa durante el cierre y no recibieron la paga por enfermedad.
Los trabajadores de los jardines de infancia cobraban poco más del salario mínimo, entre 15 y 20 dólares canadienses la hora. La Asociación de Educadores de la Primera Infancia de Ontario (AECEO) llevó a cabo una encuesta y descubrió que el 60% de los trabajadores de jardines de infancia consideraban que su salario no estaba en consonancia con el trabajo que realizaban, y el 68% se quejaba de una gran fatiga.
Como resultado, en febrero de 2021, el empleo en el sector había caído un 21%. Muchos empleados de las guarderías pasaron a trabajar como auxiliares de enseñanza y cuidadores extraescolares en las escuelas, donde el salario mínimo empezaba a ser de 22 dólares canadienses por hora.
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Desde la perspectiva de los padres de niños pequeños, la situación parece aún peor. Casi 100.000 mujeres dejaron su trabajo al comienzo de la pandemia y no volvieron hasta marzo de 2021. El número de hombres que abandonan su trabajo es 10 veces menor.
Actualmente, sólo el 58,4% de los niños menores de cinco años asisten a la guardería en Canadá. Más de la mitad de las guarderías de Canadá son privadas. El coste mensual de un solo hijo es comparable al alquiler de una vivienda. El coste mensual medio nacional por niño en 2020 fue de 995 dólares canadienses. En una ciudad cara como Toronto, el padre medio gastó 1.866 dólares canadienses por niño y mes. Y en las provincias, algunos empresarios, para atraer a los empleados, construyeron su propia guardería.
¿Qué pretenden cambiar las distintas provincias de Canadá?
Gracias a una financiación federal de 149,9 millones de dólares canadienses, pronto se introducirán dos días de desarrollo profesional remunerado para el personal en las guarderías autorizadas de Ontario.
La provincia de Nuevo Brunswick se ha comprometido a aumentar la tarifa horaria de los trabajadores de las guarderías a 23,47 dólares canadienses por hora.
La provincia de Quebec se ha comprometido a aumentar los salarios de los profesores de preescolar cualificados en un 12% en tres años y a mejorar las cualificaciones de 7.000 educadores para 2026, así como a contratar a 18.000 nuevos. Para los que sigan estudiando para ser profesores de educación infantil, la provincia pagará becas.
La provincia de Manitoba quiere crear 23.000 nuevas plazas de guardería en los próximos cinco años. Esto requerirá entre 4.600 y 6.000 nuevos trabajadores de guardería.
La provincia de Nueva Escocia creará 9.500 plazas de guardería y aumentará el número de plazas de guardería en al menos un 10%. Para 2022-2023 debería haber 350 nuevas plazas en las guarderías estatales.
La provincia de Columbia Británica ha cambiado las condiciones de su programa de inmigración: ahora habrá sorteos separados para profesores de jardín de infancia. Podemos suponer que otras provincias seguirán pronto el ejemplo de B.C.
