La brecha en la política de inmigración de Canadá

El año pasado, Canadá permitió a los ucranianos y sus familias entrar en el país en el marco del programa CUAET (Canada-Ukraine Authorization for Emergency Travel). Un visado expedido en virtud de este programa da derecho a vivir, estudiar y trabajar en Canadá durante un máximo de tres años. Más de 600.000 ciudadanos ucranianos han obtenido ya un visado de emergencia; 184.908 de ellos llegaron a Canadá.

Al mismo tiempo, los titulares de visados de emergencia no tienen derecho a las mismas medidas de apoyo que las personas con estatuto oficial de refugiado, según menciona Ihor Michalchyshyn, director ejecutivo del Congreso Ucraniano Canadiense (UCC). Los participantes en el CUAET no pueden optar a las ayudas económicas del gobierno ni a los préstamos estudiantiles y tienen que costear su estancia en Canadá por sí mismos.

El programa CUAET expira el 31 de marzo de 2023. Michalchyshyn espera que el gobierno prorrogue el programa.

Katie Crocker, directora general de la Affiliation of Multicultural Societies and Service Agencies of British Columbia, sugiere que el gobierno federal introduzca cambios en el programa. En primer lugar, sugiere recopilar información sobre los participantes en el programa antes de que lleguen al país, por ejemplo, su dominio del idioma, el número de miembros de la familia, las cualificaciones, la hora de llegada, etc. En segundo lugar, sugiere limitar el número de solicitudes que pueden aprobarse (el gobierno no puso específicamente un límite a las solicitudes para acelerar el proceso de entrada).

Según una encuesta, el 84% de los ucranianos acogidos al programa CUAET quieren quedarse en Canadá y obtener la residencia permanente cuando expire su visado. El gobierno aún no ha decidido qué ayudas se ofrecerán a los ucranianos a los que se deniegue la residencia permanente.

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