Canadá supera a EE.UU. en la clasificación de los mejores países para estudiar

Calificación por una organización internacional independiente.

La calidad y la accesibilidad de la educación son indicadores de un país atractivo y desarrollado. Para evaluar su nivel, existe el Programa Internacional para la Evaluación del Rendimiento Educativo de los Alumnos o PISA, es decir, la calificación educativa autorizada.

La elabora la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos, una organización económica internacional de países desarrollados que reconocen los principios de la democracia representativa y la economía de libre mercado. En su nueva clasificación para 2022, Canadá supera a Estados Unidos y se convierte en el país mejor educado de Norteamérica.

Lo mejor de lo mejor

En 2022, estudiantes de 81 países realizaron una serie de pruebas para evaluar y comparar las medias nacionales en educación. Las pruebas suelen administrarse cada tres años, pero la pandemia provocó un retraso y estos resultados fueron especialmente bien acogidos.

Así, el primer puesto fue para Singapur, donde los alumnos obtuvieron los mejores resultados en matemáticas, ciencias y lectura, con 560 puntos en su propio sistema PISA. Le siguen en el top 5 Macao, Taiwán, Japón y Corea del Sur.

Los países europeos obtuvieron esta vez peores resultados de lo habitual. Los investigadores creen que esto se debe a problemas sistémicos y a largo plazo, como la falta de apoyo de los profesores y de recursos.

El primero entre los países europeos es Estonia, que obtuvo 516 puntos y se situó en séptimo lugar. Los alumnos de este país destacaron especialmente en ciencias (526 puntos). Irlanda ocupa el noveno puesto, con unos resultados especialmente buenos en lectura (516 puntos).

Canadá, con sus 506 puntos, ocupó un respetable octavo lugar y recibió las puntuaciones más altas de Norteamérica, especialmente en ciencias. Estados Unidos, por su parte, quedó muy rezagado con una puntuación total de 489 y ocupó el puesto 18.

A quién no le va tan bien

Los resultados de PISA en matemáticas empeoraron en todo el mundo en comparación con 2018: una media de 15 puntos, lo que corresponde a unas tres cuartas partes del curso escolar. Al mismo tiempo, la lectura descendió algo menos, medio curso escolar, y los niveles de educación científica se mantuvieron más o menos igual.