Los canadienses, indignados por las nuevas normas de Netflix
La semana pasada, Netflix Canadá empezó a notificar a sus usuarios las nuevas normas de contraseña única para usuarios que no viven juntos.
Según ellos, todos los aparatos y televisores en los que se vean contenidos del servicio de streaming desde un perfil concreto deben estar en la misma ubicación.
Sin embargo, si un usuario quiere añadir a otro espectador que no viva con él, tendrá que pagar una determinada cantidad además de su cuota mensual. Aquellos que tengan una cuenta Premium tendrán que pagar 7,99 dólares adicionales al pago mensual de 21 CAD para conectar a su cuenta a dos usuarios más que vivan en otro lugar. Habrá que pagar la misma cantidad al propietario de una cuenta estándar por un solo espectador adicional cuyos gadgets se encuentren en una geoetiqueta diferente.
El higienista del streaming aún no ha especificado cuándo entrará en vigor la nueva normativa, pero ya ha desatado una oleada de negatividad entre sus usuarios canadienses.
Los indignados son los que se sientan desapercibidos en el cuello de los padres y siguen utilizando su cuenta de Netflix, aunque hace tiempo que se han convertido en adultos por su cuenta y se han mudado de casa de sus padres. Los propios padres indignados, cuyos hijos estudiantes viven en residencias universitarias y no en casa, se verán ahora privados de ver libremente Stranger Things.
"Netflix está castigando a los estudiantes por ser estudiantes", escribe un columnista canadiense de la web Digital Trends, cuyo hijo estudiante vive en el campus a solo 45 minutos de su ciudad natal, pero ya no podrá usar la cuenta de su padre para ver contenidos de Netflix gratis. — Tendré que decir, lo siento hijo, pero no Netflix ahora. Aunque quizá sea mejor plantearse la idea de despedirse del servicio de streaming por completo."
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