Un gran paso en la lucha contra los incendios forestales
El Gobierno de Canadá ha anunciado un aumento de los fondos destinados a la formación de bomberos.
La temporada de incendios forestales sin precedentes en Canadá continúa y, según las previsiones, aún está bastante lejos de terminar. El gobierno canadiense reconoce que en un momento así es importante prestar apoyo a los afectados por el fuego, así como reforzar la preparación del país ante los incendios forestales, que probablemente no dejarán de ser un fenómeno estacional en los próximos años.
Estos fondos se utilizarán para poner en marcha el programa "Responding to the Interface" de la IAFF, que proporcionará formación especializada a los bomberos, mejorando sus habilidades y capacidades. Esta formación ayudará a preparar mejor a los bomberos y a equiparlos para luchar contra los incendios forestales, especialmente en la interfaz urbano-forestal, donde tradicionalmente ha sido especialmente difícil controlar el riesgo de incendios.
En el marco de este proyecto, la IAFF formará a 25 instructores en Kamloops, Columbia Británica, sobre cómo impartir una metodología de formación coherente y eficaz en materia de respuesta a incendios forestales del programa Cadre Building. La IAFF también impartirá 15 cursos en cinco lugares diferentes del oeste de Canadá, formando hasta 325 bomberos para responder a incendios urbanos.
Más del 10% de los canadienses viven en la interfaz urbano-forestal. Se trata de una zona de 32 millones de hectáreas en todo el país. En esta zona, los asentamientos urbanos se yuxtaponen a zonas de alto riesgo de incendio, como los bosques. Estas zonas son prioritarias en la lucha de Canadá contra los incendios forestales. Los incendios en la interfaz urbano-forestal suponen la mayor amenaza para la vida y los bienes de muchos canadienses. Aunque se contengan rápidamente, pueden tener efectos devastadores en las comunidades, como la propagación de una densa humareda o la evacuación de los residentes, que puede resultar estresante para muchos.
Este proyecto, que complementa los planes del Gobierno de Canadá de formar a 1.000 nuevos bomberos en los próximos 5 años, ayudará a determinar las mejores prácticas y recomendaciones para la futura formación de los bomberos forestales de cara a la segunda fase de la Fundación para la Formación, que se pondrá en marcha el año que viene.
Esta iniciativa es una de las medidas que está tomando el Gobierno para combatir los incendios forestales. Otras son el anuncio del Ministro Wilkinson de financiar la formación de 300 bomberos indígenas y 125 guardianes indígenas contra incendios, el programa gubernamental Fighting and Managing Wildfires in a Changing Climate — Equipment Fund, que ayuda a las provincias y territorios a adquirir los equipos necesarios, una inversión a largo plazo en WildFireSat, un sistema por satélite que permitirá predecir incendios, y otras más.